El control de la procesionaria del pino

El control de la procesionaria del pino se hace dificil pues con el cambio climático, las orugas bajan antes lo que provoca un reto para la empresas de control de plagas y para los ayuntamientos, principales actores en el control y eliminación de la procesionaria.

El control de la procesionaria del pino y su dificultad

Según el último informe anual del Ministerio de Medio Ambiente sobre el estado forestal en nuestro país: los daños observados en uno de cada cuatro árboles son provocados por insectos defoliadores como la procesionaria (Thaumetopoea pityocampa).

Uno de los factores que agravan las plagas de procesionaria del pino hoy día son las subidas de temperaturas en la Tierra. La Agencia Española de Meteorología (Aemet) afirma que debido a la actividad humana, el calor en los meses de verano han aumentado y encima se alarga hasta 35 días más que en la década de los ochenta.

Esto supone un espaldarazo a las infestaciones por procesionaria ya que al subir las temperaturas, la procesionaria inicia su descenso desde sus nidos en lo alto de los pinos para enterrarse bajo tierra y luego emerger convertida en polilla. Este ciclo se ve alterado por las temperaturas y comienza mucho antes.

Por ello, es vital que las labores de prevención durante los meses de invierno se activen antes y sean más concentradas en zonas forestales cercanas a los ciuadadanos.

El peligro de la procesionaria para las personas

Los problemas que hay que tener en cuenta con estas orugas procesionarias son principalemente sus pelos urticantes que provocan urticarias al contacto.

Esto puede generar tanto en personas como en animales cuadros alérgicos y, dependiendo de la sensibilidad a estos pelos, pueden resultar graves. Ademas, a los animales les puede envenenar pues la toxina Thaumatopina que contienen estos insectos llega a producir necrosis en garganta y lengua.

Entre los métodos que se realizan para paliar el control de procesionaria del pino es la endoterapia. Este método conlleva una serie de inyecciones en los árboles como si fuese una vacuna.

Estas inyecciones casi no dejan marca en los troncos y supone una técnica menos invasiva, además de sujetar los costes por tratamiento. La endoterapia es menos dañina que la fumigación y protege al árbol del los insectos defoliadores.

Byostasys, especialistas en endoterapia para eliminar la procesionaria

Para controlar las poblaciones de procesionaria se utilizan medios físicos, químicos y biológicos. Byostasys está especializada en el Control de Plagas en Madrid y alrededores. Trabajamos con particulares y empresas ofreciendo servicios de desinfección, fumigación de cucarachas, eliminación de chinches y termitas, control de aves, desratización y control de legionella entre otros, de una forma rápida y eficaz, con resultados asegurados por escrito.