Las garrapatas tienen cuatro fases en su ciclo de vida: Huevo, larva. Ninfa y adulto.
Por lo general el apareamiento se lleva a cabo sobre el cuerpo del huésped. Posteriormente la hembra cae al suelo y deposita los huevos. Las hembras adultas de las garrapatas duras suelen alimentarse una sola vez y ovopositan una gran cantidad de huevos (10.000 o mas). Algunas hembras adultas de garrapatas blandas se alimentan varias veces y ovopositan de 20 a 50 huevos. Después de cada comida. Dependiendo de las condiciones de temperatura y humedad, las larvas eclosionan en un periodo que va de las dos semanas a varios meses.
En la primera fase larvaria la garrapata tiene 6 patas. Estas larvas tienen que encontrar y pegarse a un hospedero para alimentarse de sangre. Después de alimentarse, caen al suelo, cambian de piel y emerge una ninfa con 8 patas. Algunas larvas de garrapata se alimentan de un solo huésped y permanecen sobre el para mudar. Dada la dificultad de encontrar un huésped adecuado las larvas pueden soportar largos periodos sin alimentarse.
Las ninfas se parecen a los adultos en el numero de extremidades. Sin embargo carecen de orificio genital, al igual que las larvas pueden sobrevivir durante largos periodos sin alimentarse. Después de encontrar a un huésped y alimentarse la ninfa muda y se convierte en adulto. Las garrapatas duras solo tienen una fase ninfal mientras que las blandas suelen tener varias.
Las garrapatas adultas pueden necesitar varios días de alimentación antes de poder reproducirse. Los machos de las garrapatas duras mueren después de reproducirse y las hembras después de ovopositar. Los machos de las garrapatas blandas viven más tiempo y en las hembras la ovoposición es un periodo activo. Las garrapatas adultas pueden sobrevivir largos periodos sin alimentación, pudiendo estos periodos llegar hasta los 3 años en algunas especies.